En el caso de Iker, una innovadora técnica basada en proteínas ricas en factores de crecimiento (PRGF) mejoró notablemente el pronóstico de sus lesiones profundas en la córnea.
(Video de cirugía al final de la página)
Iker, un carlino de 6 años había sufrido una mordida de perro de tal gravedad que había tenido que ser ingresado.
Cuando acudió al IVO padecía heridas severas en los dos ojos, con sensación de malestar y dolor.
En el ojo izquierdo podía apreciarse una perforación corneal.
Una perforación corneal es una herida en la superficie del ojo de tal profundidad que corre el riesgo de dejar las estructuras intraoculares desprotegidas.
Habitualmente este tipo de lesiones requieren de una cirugía urgente para preservar el ojo y su visión.
Las pruebas que se practicaron a Iker para determinar el tipo de las heridas corneales fueron:
• Exploración con lámpara de hendidura
• Test de fluoresceína
• Evaluación de los reflejos pupilares y amenaza
Las pruebas determinaron que Iker tenía las siguientes patologías:
• Ojo derecho: estrabismo divergente (ojo desviado), úlcera estromal profunda con queratomalacia (infección que hace el efecto que la córnea se esta deshaciendo) y heridas en los párpados.
• Ojo izquierdo: perforación de córnea y queratitis pigmentaria.
La perforación del ojo izquierdo era de tal gravedad que se podía apreciar como el humor acuoso (liquido que está dentro del ojo) salía a través del orificio.
Perforación corneal y queratitis pigmentaria en el ojo izquierdo de Iker.
Ojo derecho de Iker con heridas palpebrales, úlcera estromal profunda, estrabismo divergente y queratitis pigmentaria.
Se realizó una cirugía de injerto de córnea tectónica, con la colocación de coágulo y membrana de fibrina ricos en factores de crecimiento (PRGF) en el ojo izquierdo.
En el ojo derecho se colocan también coágulo y membrana ricos en factores de crecimiento y se protege el ojo con la membrana nictitante.
Tras la cirugía se prescribe un tratamiento con antibióticos tópicos y con colirio rico en factores de crecimiento (Endoret).
Se trata de una técnica innovadora que está dando notables resultados en distintos campos de la cirugía.
Las proteínas ricas en factores de crecimiento (PRGF) son componentes del plasma sanguíneo que, aplicados en una alta concentración sobre los tejidos, favorecen su regeneración.
El colirio Endoret se fabrica en el laboratorio de IVO a partir de la sangre del propio paciente con una tecnología patentada por BTI que permite obtener una alta concentración en PRGF.
El coágulo y la membrana de fibrina rica en PRGF se elaboran en quirófano a partir de la sangre del propio paciente con una técnica distinta a la del colirio, y su objetivo es también favorecer la regeneración de la córnea gracias a los PRGF.
La aplicación de esta membrana en lesiones profundas de la córnea, como el caso de Iker, está dando resultados muy esperanzadores al potenciar las capacidades de reparación del propio organismo y reducir las posibilidades de infección y de complicaciones post-cirugía, al tiempo que disminuye el dolor y la inflamación.
Una semana después de la cirugía, el injerto tiene buena adherencia y el ojo izquierdo responde a la luz y a la amenaza.
OCT del ojo izquierdo a la semana de la cirugía.
OCT del ojo izquierdo a la semana de la cirugía.
Una semana después de la operación ya se apreciaban cambios en la córnea, una buena adherencia del injerto, respuesta a la luz y la amenaza.
En la siguiente revisión se le practicaron varias pruebas para comprobar la evolución:
Realización de la OCT a Iker durante la 2a revisión. Al fondo, imagen de su córnea.
Tonometría para medir la presión ocular de Iker.
Fotografías para el control de la evolución de Iker en su segunda revisión.
Imágenes OCT del ojo izquierdo de Iker en su segunda revisión. Se aprecia la adherencia a la córnea y la medición del espesor de la córnea.
El test de fluoresceína solo dio positivo en las zonas de los puntos. La OCT nos mostró cómo el injerto y el coágulo cada vez están mas adheridos a la córnea de Iker. La tonometría se le realizó para controlar la hipertensión ocular, y los valores fueron normales. El test Dazzle dió positivo (responde a las luces), tiene reflejos pupilares.
En las próximas semanas Iker debe seguir realizando visitas de control.
Hemos pasado de un pronóstico reservado a un pronóstico bueno para la recuperación de la visión.