La operación de catarata en perros, gatos, caballos tiene por objetivo extraer el cristalino que impide la visión y sustituirlo por una lente intraocular que cumpla su función.
La causa más frecuente de aparición de las cataratas en las mascotas es el envejecimiento. Pero también pueden producirse por otras patologías, golpes o procesos inflamatorios. Puedes consultar aquí más información sobre la catarata, sus causas y qué animales son más propensos a desarrollarla.
Cuando la catarata se está formando, aparece la visión borrosa y en ocasiones visión doble, y la pupila puede parecer más blanquecina. Pero sólo después de una exploración cuidadosa con el instrumental adecuado podremos descartar otras enfermedades de distintas partes del ojo (como la córnea, retina o nervio óptico) que pueden ser también la causa de la pérdida de visión.
Normalmente la catarata, especialmente las de los animales mayores, se desarrolla de manera lenta y progresiva. En pacientes jóvenes o con diabetes pueden desarrollarse en un corto espacio de tiempo, incluso en pocos días.
En ningún caso es posible predecir la velocidad a la que se desarrollará hasta causar problemas graves de visión.
Es aconsejable intervenir cuando la pérdida de visión provocada por la catarata interfiere negativamente en las actividades habituales del paciente. Siempre que la cirugía de la catarata pueda ayudar al paciente a ver mejor, vale la pena hacerlo.
Hay que tener en cuanta que las cataratas van avanzando con la edad y pueden llegar a provocar una ceguera en el ojo o ojos afectados
Antiguamente, las cataratas no se operaban hasta que el animal estaba prácticamente ciego. Actualmente esta actitud no tiene sentido, ya que se sabe que la intervención de una catarata muy evolucionada es, en general, más complicada.
En perros diabéticos las cataratas suelen desarrollarse muy rápidamente, e ir acompañadas de otras complicaciones. En estos casos es especialmente importante no retrasar la cirugía. Consulta aquí más información sobre la catarata diabética.
La catarata también puede presentarse ya desde el nacimiento, o en animales muy jóvenes (catarata congénita) y puede tener una evolución muy rápida, incluso en pocos días.
La cirugía de cataratas tiene por objetivo extraer el cristalino que impide la visión y sustituirlo por una lente intraocular que cumpla su función.
La técnica de elección en perros, gatos y otros animales es la facoemulsificación del cristalino e implante de lente intraocular.
La cirugía en sí dura aproximadamente 20-30minutos en cada ojo, durante los cuales el paciente está bajo anestesia general.
No es una anestesia general muy profunda puesto que también se aplica anestesia local.
El postoperatorio es sencillo. Son dos semanas de collar isabelino (o campana), en los cuales daremos tratamiento tópico (de 3-4 colirios diferentes 3 veces al día), antibiótico y antiinflamatorio oral los primeros días. Después la medicación tópica disminuye.
El paciente debe hacer un leve reposo (no ir a la playa, no bañarse, no jugar excesivamente con pelotas u otros objetos con los que pueda golpearse en los ojos).
El pronóstico es favorable siempre y cuando el postoperatorio vaya correctamente.
La facoemulsificación del cristalino es una técnica quirúrgica cuyo objetivo es la extracción del cristalino opacificado y su sustitución por una lente intraocular que haga su función.
A través de una microincisión de menos de 3mm introducimos un aparato que disuelve el cristalino y lo aspira. Por la misma microincisión se coloca la lente intraocular, con lo que el postoperatorio es muy liviano para el paciente. La recuperación de la visión es muy rápida (normalmente una semana) y el animal llega a tener una visión prácticamente normal.
En una cirugía de catarata no sólo es importante que la operación vaya bien, sino que es esencial que el postoperatorio sea muy cuidadoso.
Hay que evitar:
Si vemos que la evolución de ese ojo es la adecuada, en pocos días volverá a hacer vida normal, y entonces ya podremos comprobar cómo recupera visión progresivamente.
Paco Simó, oftalmólogo veterinario y director médico del IVO, desmonta falsos mitos sobre las cataratas en perros, gatos y caballos.
Siempre es recomendable operar las cataratas diabéticas en perros cuanto antes. El caso de Duque muestra las complicaciones de retrasar la operación.
Las cataratas tienen tratamiento prácticamente a cualquier edad y en cualquier especie. Es aconsejable operarlas incluso en pájaros, ya que si están muy evolucionadas pueden dar otras complicaciones complicaciones oculares graves.