El hemangiosarcoma ocular es un tumor maligno que afecta a perros expuestos a radiación UV. Su detección temprana es clave
Yack es un macho de Border Collie de 6 años de edad, que se pasa el día en la playa disfrutando de las olas con sus tutores.
Desde hacía unas semanas, sus tutores se habían dado cuenta de una pequeña mancha rojiza en el lateral del ojo derecho, que pese a estar con colirios, no desaparecía, e incluso había aumentado un poco de tamaño.
Durante la exploración oftalmológica en consulta, pudimos ver mediante la lámpara de hendidura, una pequeña masa de tonalidad rojiza en la conjuntiva lateral del ojo derecho de Yack muy próximas al limbo y la córnea (estructuras de la superficie del ojo), que pese a no generarle molestias, era necesaria su extracción al ser un posible hemangioma o hemangiosarcoma (tumoraciones vasculares del ojo).
Los hemangiomas (benignos) y hemangiosarcomas (malignos) son tumores vasculares que afectan al tejido conjuntival, a la membrana nictitante y/o córnea de nuestras mascotas. Son masas de tonalidad rojiza, con ligero relieve que pueden incluso invadir la parte interna del ojo y alterar otras estructuras.
Estos tumores suelen aparecer en pacientes que están expuestos a luz ultravioleta y superficies reflectantes, como por ejemplo zonas costeras. Razas como los Border Collie, Pastores Australianos y Pastores Alemanes, que suelen pasar mucho tiempo al aire libre, especialmente en zonas con alta radiación UV, están predispuestas a este tipo de tumores.
Su diagnóstico se basa en la exploración oftalmológica en consulta, y los resultados de la citología o biopsia realizada.
A los pocos días, se intervino quirúrgicamente a Yack para extirpar la masa y enviarla al laboratorio con el fin de obtener un diagnóstico definitivo. En su caso, como únicamente afectaba a la conjuntiva del ojo derecho, y no invadía otras estructuras del ojo, sólo fue necesaria la extracción quirúrgica de la masa y la aplicación de crioterapia, y por supuesto, esperar al resultado del laboratorio.
En general tanto los hemangiomas como los hemangiosarcomas deben ser extirpados quirúrgicamente, y en múltiples ocasiones se emplea el uso de la crioterapia, para evitar que puedan aparecer nuevamente.
En caso de obtener una biopsia con resultado de tumoración maligna, se ha de realizar un seguimiento del paciente, y extirpar nuevas masas que aparezcan. Los hemangiomas no tienen riesgo de metástasis, pero en el caso de los hemangiosarcomas, aunque es raro, existe un pequeño riesgo de metástasis sistémica. Por ello, se debe realizar un seguimiento adecuado y extirpar cualquier nueva masa que aparezca.
La imagen 1 del ojo de Yack se tomó el primer día de consulta. Se aprecia una tumoración conjuntival vascular, próxima al limbo del ojo derecho.
En la imagen 2, el ojo de Yack dos días después de la cirugía con una ligera mancha de sangrado post quirúrgico.
La imagen 3 fue tomada una semana después. Podemos observar que la conjuntiva está recuperada plenamente sin signos de sangrado.
Y finalmente, la imagen 4, un mes después de la cirugía con ausencia de hiperemia conjuntival, completamente recuperado.
En Ibiza, el índice de radiación UV es más elevado que en otros lugares, por lo que es recomendable proteger a nuestras mascotas de la radiación y realizar seguimientos de sus ojitos, para detectar posibles tumoraciones cuanto antes.
Es importante tener en cuenta que el tamaño del tumor no determina su malignidad. Existen tumoraciones benignas de gran tamaño, y tumoraciones malignas de muy pequeño tamaño. Por ello, es fundamental proceder con la extirpación y biopsia lo antes posible.
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