¿Sabías que algunas pestañas pueden causar daño ocular en animales? Hablamos sobre distiquiasis y distriquiasis, sus causas, síntomas y cómo se pueden tratar.
La distiquiasis y su variante, la distriquiasis, son anomalías del crecimiento de las pestañas que afectan al margen palpebral, y se consideran causas frecuentes de irritación ocular en perros. Ambas condiciones implican la presencia de pestañas ectópicas que emergen anormalmente desde los orificios de las glándulas de Meibomio, en el borde libre del párpado, donde normalmente no deberían existir pelos.
Estas pestañas aberrantes pueden ser finas y blandas (y pasar desapercibidas), o gruesas y rígidas, generando molestias severas y lesiones oculares progresivas si no se tratan adecuadamente.
Los síntomas varían en intensidad dependiendo del número, rigidez, ubicación y dirección de las pestañas:
En animales jóvenes, puede pasar desapercibido hasta que las pestañas crecen lo suficiente como para causar daño clínico.
Tanto la distiquiasis como la distriquiasis son afecciones de origen congénito y hereditario, aunque no siempre se manifiestan desde edades tempranas.
Estas anomalías palpebrales se observan con mayor frecuencia en ciertas razas caninas predispuestas, especialmente aquellas con características anatómicas específicas o antecedentes hereditarios. Entre las más afectadas se encuentran:
Estas afecciones son raras en gatos, excepcionales en caballos, y prácticamente inexistentes en otras especies.
El diagnóstico requiere un examen oftalmológico completo y minucioso:
En ocasiones puede ser necesaria la sedación ligera, especialmente si hay blefarospasmo que impide la exploración.
El tratamiento de la distiquiasis y distriquiasis dependen de la severidad clínica y del número de pestañas afectadas. El objetivo terapéutico es eliminar permanentemente el folículo piloso anómalo y evitar el roce corneal.
La distiquiasis y distriquiasis son frecuentes en perros, especialmente en razas predispuestas. En gatos, estas anomalías son muy raras, y en caballos se consideran excepcionales.
No existe una prevención directa, pero se pueden tomar medidas para reducir su impacto:
Os mostramos algunos casos de Distiquiasis y distriquiasis en animales en fotos.
Imagen 1. Jack russell con distiquia en párpado superior del ojo derecho
Imagen 1 – Se aprecia claramente el pelo aberrante en la línea palpebral superior.
Imagen 2. Gato Exótico con distiquia en párpado inferior
Imagen 2 – El pelo anómalo roza la superficie ocular provocando molestias.
Imagen 3. Gato Exótico con múltiples distiquias en párpado superior
Imagen 3 – Distiquiasis múltiple con riesgo de lesiones corneales.
Imagen 4. Jack russell con múltiples distiquias en párpado superior
Imagen 4 – Caso bilateral con presencia de varios cilios anómalos.
Imagen 5. Bulldog francés con distiquias en párpado superior derecho
Imagen 5 – Pelos emergiendo desde la línea de Meibomio que irritan la córnea.
La distiquiasis y la distriquiasis son causas frecuentes de irritación ocular en perros y pueden derivar en lesiones corneales dolorosas si no se tratan. Su diagnóstico precoz y tratamiento individualizado, que puede incluir desde medidas conservadoras hasta técnicas definitivas como crioterapia o láser, son fundamentales para preservar la salud ocular y la calidad de vida de los animales afectados.
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