Bourbon, Brandy, Tekila y Ginebra son cuatro cachorros flat-coated retriever que llegaron a la asociación protectora Animals sense sostre con problemas de visión. Probablemente su propietario los crió para venderlos, pero al descubrir sus problemas de visión para desenvolverse con normalidad decidió abandonarlos a su suerte.
La asociación Animals sense sostre, de Vallirana, los llevó al IVO para someterlos a una exploración oftalmológica, durante la cual se les diagnosticó catarata congénita, un trastorno hereditario que causa la falta de transparencia del cristalino ya desde el nacimiento o en animales muy jóvenes (el cristalino es la lente interior del ojo que ayuda a ver mejor).
No fue casualidad, pues, que tres de los cuatro cachorros hermanos padecieran el mismo problema.
Bourbon tenía catarata congénita bilateral con visión muy disminuida y microftalmia (disminución del tamaño del globo ocular) en ambos ojos.
Como es preceptivo antes de realizar cualquier cirugía de catarata, se realizó una exploración oftalmológica completa para descartar otras patologías que también podrían ser causa de la pérdida de visión.
Se comprobó con la lámpara de hendidura que no había otro tipo de alteraciones en párpados, membrana nictitante ni sistema lacrimal, y se descartó la existencia de patologías de segmento posterior (vítreo, retina y coroides) con examen de fondo de ojo y ecografía ocular. Tampoco se detectó ninguna alteración de la presión ocular.
Con estos exámenes se pudo confirmar el diagnóstico de catarata congénita bilateral y la conveniencia de realizar una cirugía de catarata (facoemulsificación del cristalino y sustitución por lente intraocular).
Al cabo de unos días con tratamiento antiinflamatorio y ciclopéjico, Bourbon se sometió a una cirugía de catarata en los quirófanos del IVO.
La cirugía de extracción del cristalino se desarrolló sin problemas, y Bourbon pudo volver a casa con un tratamiento a base de antibióticos y antiinflamatorios para evitar complicaciones en los días posteriores.
Tekila y Brandy siguieron un proceso similar al de Bourbon, aunque en uno de ellos el cristalino del ojo izquierdo presentaba también una microfaquia (cristalino pequeño). De todos ellos, sólo Ginebra se libró de la operación de catarata congénita.
La evolución de los tres hermanos fue favorable y el pronóstico hasta el momento es bueno.
Ginebra, Bourbon y Tekila han sido adoptados recientemente con buen estado de salud, y Brandy lo será muy pronto.
Los hermanos de Bourbon: Ginebra, Brandy y Tekila:
Animals sense sostre/Animales Sin Techo, es una asociación protectora sin ánimo de lucro que desde el año 2002 se dedica a la acogida de animales abandonados con la finalidad de cuidarlos y conseguirles una buena adopción.
La asociación lucha con la esperanza de que un día no haya ningún animal sin hogar. Mientras tanto los acogen y se hacen responsables de ellos: “no nos gusta la idea de que mueran pensando que todos los seres humanos son como los que los abandonaron. Se merecen una segunda oportunidad”.
En la actualidad dependen de la asociación una media de 200 perros y 30 gatos que están en su refugio en Vallirana, Barcelona.
¿quieres saber más? Consulta aquí todos los animales en adopción de Animals sense sostre
Paco Simó, oftalmólogo veterinario y director médico del IVO, desmonta falsos mitos sobre las cataratas en perros, gatos y caballos.
El IVO es un centro de referencia cuya misión es la de colaborar activamente con los centros veterinarios para ofrecer la mejor atención oftalmológica a sus pacientes.
Los quirófanos de IVO son exclusivos para cirugía ocular: pensados, equipados e iluminados para operar ojos de animales.